ARMAS

Todo objeto es un arma en manos de un potencial. Mi corazón se volvió una granada que reventó en mi pecho antes de ser lanzada...

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POST-DESASTRE

Supongo que el stress post-terremoto me ha hecho bloquear varios momentos de este año, otros los cambio para alivianar la carga, y otros simplemente los he dejado pasar sin intentar retenerlos
Me sumo a la moción de que ha sido un año de mierda, siento que fue difícil, y no se si logre hacerlo bien. Siento que perdí a mucha gente que quiero, a otros solo los tengo más lejos. Extraño el bip, y tomar café. Extraño pasearme por el mall y pegarle a la tele para que funcione, extraño también a la vieja.
Ha sido un año que difícilmente olvidare, ya que muchas de las cosas que me ocurrieron, las vi reflejadas en la TV, y en los desastres naturales. Mi vida fue un desastre natural, que paso por un terremoto que la saco de su sitio y la puso a probar suerte en muchos lugares diferentes, fui pagano y vagabundo, y tengo a ratos replicas de mediana intensidad. Hay muchas cosas que se derrumbaron y otras pocas que están por caer; así como también existen otras que se mantienen de pie y las que se han levantado de la nada, esas pequeñas cosas que hoy son las que reemplazan en parte las que ya no están.
Espero poder construir el resto de mi mundo, y espero tener el apoyo de quienes siempre están con la pala al hombro. Espero tener carretilladas de suerte, y sembrar varias praderas con ilusiones. Quiero querer cada ladrillo que pondré, y cada piedra que se irá, y quiero seguir sintiendo el olor de la tierra mojada, cuando la lluvia se lleve las flores de los árboles valientes, que se mantienen de pie aún cuando el cielo no es azul.

Salud por los que siguen, los que vinieron y los que ya no están! y salud, más aun, por aquellos que no quiero que se vayan jamás.

ARRIBA

Ambos escalaron hasta la nube más alta que encontraron, se tomaron de la mano y miraron el mar de luces doradas. Se abrazaron, se hicieron promesas de amor, y se quedaron contemplando un mundo que se ve distante al suyo propio, uno que está más abajo que ellos, uno que ahí, tan arriba, ni siquiera se preocupan de escuchar...

DEFINICIONES

Que hay, que se ofrece y que se puede tomar. Sueño, frío, hambre, las manos atadas. Futuro, cerca, encima; tomar, dejar, elegir. La palabra vivir no está en el Diccionario.

CONTIGO

Es raro ya despertar sin sentirte a mi lado, como pegado a mi. Comienzo a extrañar cada vez más sentir tu olor mientras duermo y que seas lo primero que veo al despertar; esperar el momento en que abres los ojos y mirar en ellos tan profundo hasta traerte a mi lado, ya ni me doy cuenta del tiempo, ni la velocidad con la que pasa, tampoco son importantes ya las fechas, solo quiero seguir así, contigo; así, feliz.

EQUILIBRIO

Hay momentos que vagan en mi mente, recuerdos de cosas que se perdieron, y que al final de los casos son ya sólo recuerdos. Existen momentos en los que creemos estar parados en la cima de nuestra felicidad, mirando con orgullo las faldas de nuestras vidas. Pero existen instancias que nos son adversas, corrientes que vuelan en nuestra contra y nos tratan de hacer caer. Soplido tras soplido hacemos equilibrio y encontramos el punto exacto para poder mirar adelante pero con las manos y los pies bien puestos en el presente, sintiendo cada oportunidad como quien siente la lluvia.
Es imprescindible cometer errores, tropezar, y volver a estar en pie, al final de todo, son estas las experiencias que te permiten no volver al suelo, y después de un rato, se convierten en simples recuerdos.

MANO A MANO

Las horas y los minutos se fueron haciendo días, los días no querían avanzar, pero las semanas se hicieron su espacio, y se enemistaron con los meses que les quisieron pasar por encima. Sea como sea, es un año más el que se escapa de mi calendario, la última hoja de mi agenda, el último gran esfuerzo. Partí corriendo a manos llenas y no solo me adelantaron; derramaron todo aquello que llevaba dentro, y que trate de recuperar una y otra vez, en nuevas y viejas vasijas que se fueron quebrando una y otra vez. Ni comí ni dormí, pero seguí corriendo. No reí ni sentí, pero tampoco me frené, porque las manos que me impulsaron fueron muchas, y mientras unas aparecían, otras que estaban se fueron desvaneciendo.
El camino se fue alivianando, y llego una brisa de aire limpio, fresco como el rocío, que me regalo los colores que me faltaban para completar mi acuarela. Y si bien aún me sigo amasando, es este el año que hizo que mi masa comenzara a tomar forma, por mi propia cuenta.